Buster Keaton

“Buster Keaton fue un payaso; un gran payaso.” Así empieza el repaso que el crítico de arte Joan M. Minguet hace a la figura y la carrera de uno de los artistas más famosos que jamás han salido de Hollywood. Es un posicionamiento claro, pero va más lejos que eso: a lo largo del primer capítulo, Minguet detalla los aspectos que definen a Keaton como uno de los grandes payasos de la historia, no solo en comparación con Charles Chaplin o Laurel y Hardy, sino también al lado de artistas como Charlie Rivel o Grock. La descripción de la construcción del personaje —el payaso— está muy cuidada, tanto en los análisis como en las referencias que se citan en el texto, y por lo tanto supone un documento especialmente interesante. Se abordan aspectos como la evolución del vestuario, de los zapatos largos típicos de augusto al sombrero indisociable del personaje de Keaton, y el hallazgo del gesto que lo define, en este caso la impasibilidad de su rostro, acompañada por un gran dominio de la mímica y la acrobacia.
En los capítulos sucesivos, en el libro se van tratando otros aspectos de la biografía artística de ese gran actor, empezando por la influencia que ejerció en la cultura occidental a través de artistas como Dalí, Buñuel y García Lorca, y críticos como Sebastià Gasch y Lluís Montanyà. El capítulo central, “El cine de Buster Keaton”, es especialmente remarcable. Minguet repasa una por una las películas de la época dorada de Keaton, las de la década de 1920, la mayoría dirigidas por él mismo; hay una profusa descripción de escenas cómicas, auténticas entradas de payaso.
MINGUET BATLLORI, Joan M. Buster Keaton. Madrid: Cátedra, 2008.
Martí Franch