Esto es el auténtico y maravilloso mundo del circo. Un mundo lleno de ilusión, belleza, simpatía y mucho esfuerzo. Un circo pionero en Europa y se podría decir que único en el mundo. Entrar en el recinto, es como viajar al pasado, recordando y viviendo las tradiciones y costumbres de la época.

Formado y llevado acabo por una gran familia, la familia RALUY, que generación tras generación coge las riendas del circo y hacen llegar allí donde van, alegría y un largo entretenimiento lleno de emociones. Una familia que siempre ha estado envuelta en el mundo de las acrobacias y del espectáculo.

Una vida formada por una gran variedad de carruajes antiguos, todos ellos reformados por ellos mismos. Sus interiores son de una gran belleza y comodidad, y en ellos viajan y viven. Te puedes encontrar con el carruaje del vestíbulo, el de los baños, el del bar y el de la venta de comida, como palomitas y refrescos. La pintura que los envuelve te brindan una bonita obra de arte y hace que te sientas envuelto en una peculiar armonía.

Los artistas de un gran nivel llevan la destreza y la habilidad a límites inalcanzables, ya que en muchas ocasiones arriesgan su integridad. La mayoría de ellos, con apellido RALUY, realizan la mayoría de los espectáculos. Fuera de la pista, hacen que te sientas como en casa. Aparte de realizar cada unos de ellos su función, participan en las distintas tareas que conlleva llevar el circo correctamente, es decir, en el intermedio puedes ver el trapecista vendiendo palomitas en el bar, o las niñas Raluy vendiendo refrescos por el recinto. Acabando la última función, todos ellos participan en el desmontaje de la carpa y en el posterior transporte al siguiente destino.

El espectáculo dura dos horas aproximadamente, en las que no dejas de sonreír ni un solo instante y una buena sensación invade tu cuerpo. Es un viaje a los distintos lugares del mundo ya que cada función representa las costumbres y/o significados de los países escogidos. Un buen momento para pasar con la gente querida, ya sean niños o mayores.

Una gran familia, unos grandes artistas y unas grandes personas, son las que hacen que no desaparezca este circo tan mágico.

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Zirkolika:¿Qué es lo primero que te seduce del circo?

David Vilanova: Lo primero que me seduce de cualquier circo es la magia y el arte realizado por unos artistas con niveles difíciles de alcanzar. Respecto al circo Raluy hay muchas cosas que me seducen, sus carromatos antiguos y únicos, sus funciones, la alegría que representan y sobretodo la familia RALUY que con un esfuerzo impresionante hacen que no desaparezca tal mundo, ya que entrar en el recinto, desde mi punto de vista es viajar al pasado.

Zrk:¿De dónde viene tu interés por el mundo del circo?

D.V: De pequeño mi abuelo tenía unos amigos que se dedicaban al circo, estos eran los Raluy. Siempre había tenido interés por este mundo ya que lo veía muy bonito y muy complejo a la vez. Hasta que encontré al circo Raluy en un pueblo donde daban función y decidí saber más sobre esta vida circense.

Zrk:¿Cómo surgió la idea de fotografiar al Circ Raluy?

D.V: Daban función en el pueblo de mi madre y me acerque y ya vi que había un bonito tema a fotografiar. Entré y me acogieron con los brazos abiertos. Ese día me fui a casa muy ilusionado y con ganas de volver. De allí los seguí durante un año por las distintas comarcas y pueblos de Catalunya.

Zrk: ¿Qué querías explicar con tus fotografías? ¿Cuál era el objetivo cuando te pusiste a trabajar en este reportaje?

D.V: Con las fotografías lo que pretendo mostrar es un poco la vida de los artistas con distintos encuadres y puntos de vista, como por ejemplo, antes de salir a pista, calentando, sus casas, etc. El objetivo era mostrar lo que el público no ve y realizar una serie de retratos de los artistas desde mi punto de vista.

Zrk: ¿Qué aprendiste con esta experiencia?

D.V: Mucho, la verdad. Primero de todo fue una experiencia muy bonita, ya que estamos hablando de muchos días en el circo. Mucha alegría me transmitieron y, cada vez que iba, sonrisas nunca faltaban. Allí me di cuenta de que una familia unida, con mucho amor y esfuerzo, tiran adelante un circo tan complicado de llevar. Una experiencia increíble.

Zrk: ¿Qué anécdotas, aventuras,… viviste con el Circ Raluy mientras los acompañaste?

D.V:No te sabría decir, ya que son muchas, pero entre ellas pues un montón de chistes, bromas, ensayos, debates sobre el fútbol, comidas, clases de música,… En fin, una muy buena aventura.

Link al fotoreportaje de David Vilanova – ‘ El viaje en carruaje’