Marina Suleymanova- El Nouveau Clown Institute (NCI) creado por el payaso Jango Edwards, se celebra anualmente durante el mes de septiembre desde el año 2009. El primer gran instituto dedicado al arte del payaso abre sus puertas a los estudiantes que estén interesados en sumergirse y aprender uno de los oficios más antiguos del mundo, vivir experiencias y prácticas inolvidables y, sobre todo, a los que estén dispuestos crear, convivir y compartir con su nueva familia clownesca. 

Desde hace 10 años, cuando el NCI empezó su existencia, y hasta el día de hoy, el instituto ha tenido unos 200 estudiantes y 140 profesores. A sus alumnos, Jango Edwards los llama “los actores en entrenamiento”. Muchos de ellos ya han empezado su carrera profesional y van al instituto para recibir consejos, profundizar y pulir sus conocimientos y talentos.

Jango Edwards empezó su investigación y aprendizaje sobre el mundo del payaso hace 45 años. “Cuando pasaron los primeros años, empecé a sentir que cerca de ser payaso. Me costó 16 años y fui a muchos lugares para aprenderlo”, comenta. Y siempre, desde entonces, quería hacer un instituto de las artes clownescas, una escuela de las escuelas, donde se mezclarían muchas técnicas diferentes y se unirían en el mismo espacio. Desde la tradición a lo más contemporáneo, del bufón al comediante, del excéntrico al trío clásico, del mimo al charlatán. La idea es que las nuevas generaciones de payasos y payasas, en vez de dar vueltas por el mundo buscando diferentes cursos, puedan venir al Nouveau Clown Institute y encontrarlos a todos en un mismo lugar y en un programa bien combinado. Ayudar a las nuevas generaciones de payasos es una de las misiones principales de Jango Edwards.

El primer instituto tuvo lugar en la Fàbrica de les Arts Roca Umbert de Granollers (Barcelona) en el 2009 y fue todo un éxito. Los artistas de diferentes países aprobaron la eficacia del programa del nuevo proyecto y en un solo mes consiguieron crear una familia clownesca que va creciendo año tras año hasta hoy en día. Después de los dos primeros años en Roca Umbert, el instituto se celebró en diferentes espacios y lugares. En Le Moulin Jaune de Slava Polunin (Francia), en el Circ Cric de Tortell Poltrona y Montserrat Trias (Catalunya), también en Viena, Noruega, Venecia y Barcelona. NCI no es un sitio, es un lugar donde la gente vive en familia y comparte. “El instituto se basa en la definición de que el clown es el mejor actor en el mundo. No trata de la fama, sino sobre cambiar el mundo a través del humor”, comenta Jango.

A parte de las clases de Jango, el instituto ha contado, entre otros, con Virginia Imaz, Tortell Poltrona, Nola Rae, Slava Polunin, Leo Bassi, David Larible, Tom Greder, David Shiner, Johnny Melville y el fallecido Joan Montañés ‘Monti’. Todos los maestros son diferentes y no ofrecen un solo camino a seguir. No enseñan, sino abren puertas. Lo más importante es que el alumno sepa lo que está buscando. Ser payaso, según Edwards, es reclamar tu libertad. Una de las cosas más importantes que descubrió Jango durante los años del NCI son las payasas. “¡Son más divertidas que yo! Porque el arte del payaso es un arte emocional y las mujeres tienen más desarrollado este lado. El mejor payaso es el que está en contacto con sus emociones”, reclama.

Este año, coincidiendo con el 10.º aniversario, el instituto se celebrará del 2 de septiembre al 6 de octubre en el Centre Cívic Drassanes de Barcelona (c/Nou de la Rambla, 43). Las clases serán en inglés, francés, español y ruso con traducción, y para inscribirse hay que enviar un correo a nouveauclown@gmail.com. Al final de cada semana, los actores en formación, profesores y artistas invitados presentarán el Cabaret Cabrón, que estará abierto al público. Entre los profesores de este año estarán Jango Edwards (formulas cómicas), Nola Rae (pantomima), Leo Bassi (el arte del bufón), Claudia Cantone (meditación y reiki), Carlo-Mô (cuerpo y emociones), David Larible (el maestro de actuar en la pista redonda), Knut Ostradal (comedia del “fart”), Carolina Feliu (improvisación) y Angela Delfini (masaje consciente), entre otros. Al final de nuestra entrevista, Jango dijo: “Lo más interesante para mí es seguir a estas personas cuando el curso se acaba. Mirar lo que hacen [me enseña la mano con la piel de gallina]. Ver cómo el grano crece, ver que se relacionan entre familia”.

(Artículo publicado en el número 61 de la revista ZIRKÓLIKA). Puedes suscribirte a la revista aquí.