El pasado 30 de noviembre finalizaba la XXV edición del Festival Internacional del Circo de Roma, o lo que es lo mismo, el Golden Circus Festival, marcado con el sello de tradición y calidad de la familia Orfei.

Liana Orfei, orgullosa de este significativo logro (veinticinco años llenando las butacas cada otoño) quiso regalarnos en esta edición un programa rico, muy internacional, y con un componente de fusión considerable. En efecto, no es fácil encontrarse con una rueda Cyr (Hugo Noel, oro), un ejercicio aéreo de cintas (Martín Alvez, plata), o un ilusionista austríaco (bronce) en un mismo espectáculo de circo. Durante la celebración de la ceremonia de clausura con entrega de trofeos, los participantes dieron lo mejor de sí mismos. A pesar de encontrarnos con algunas diferencias notables de nivel, hubo actuaciones impecables, como la del inglés Gordon Márquez en los malabares (con un estilo desenvuelto que nos recordó a Picasso Jr.), el dúo ruso Troupe Grosu (equilibrios sobre escalera) o la de nuestro representante español, Tyrone Laner con su número de lazos (este invierno lo podremos ver lanzando cuchillos con el Gran Circo Mundial).

La pareja de acróbatas mexicanos Dragon; el sorprendente número de un fakir italiano, Marco Cardona; el ejercicio de telas del alemán Tim Schneider o los breakdancers suizos Roc Kidz; acompañarían, entre otros, el completo programa de este decano festival italiano.