Ayer domingo, 5 de noviembre, se representó la última de las diecinueve funciones de un espectáculo irrepetible que probablemente se repetirá. 

Debido a su éxito y a la buena relación personal y profesional que se ha afianzado entre el Circ Històric Raluy y el conocido payaso Tortell Poltrona, es probable que volvamos a verles juntos.

El espectáculo se basa en una adaptación de Kirko, el espectáculo del circo dirigido por Rosa Raluy, para integrar las salidas de Tortell Poltrona, que se enmarcan perfectamente con la estética y la propuesta. 

La puesta en escena busca llevarnos de viaje por la historia del circo y tiene un claro componente pedagógico en la narración de Aleix Gómez, que ilustra en momentos puntuales los números que vemos con información de gran valor. 

Cabe destacar la admiración que se crea en la carpa cuando Jillian y Kimberley Giribaldi Raluy presentan su número de icarios en la segunda parte y el narrador informa al público de que son las únicas mujeres en realizar este número, tradicionalmente realizado por hombres. 

Primera parte

Tras una entrada coral el espectáculo empieza con el número de malabares de William Giribaldi, al estilo “3 piece juggler” sobre un precioso escritorio antiguo. 

Tras él, Jillian y Kimberley Giribaldi Raluy presentan un número de alto nivel de straps en dúo con música de Bruce Springsteen. 

Un murmullo llena la sala con la primera entrada de Tortell Poltrona con su conocido número en el que se maquilla en directo. 

Rosa Raluy presenta un original y poético número de pintura rápida en el que homenajea a su padre, Calos Raluy y es seguido por un número de clown representado por Tortell junto con el clown italiano David Vasallo.

Continuamos con un impresionante número de barra rusa presentado por el Trio Barbara en el que Volha Mokahtsova deja sin respiración a la grada con una precisión milimétrica y asumiendo un alto riesgo tan solo mitigado por sus portores.

Para cerrar, el clown David Vasallo hipnotiza, o cree hipnotizar, a cuatro espectadores con los que realiza un cómico número de levitación. 

Segunda parte

Tras el descanso y el obligado paseo por los preciosos vehículos de época y el bar ubicado en un vagón del circo, nos encontramos de nuevo con David Vasallo en un número de acrobacia y equilibrio cómico sobre maroma. 

Le sigue el espectacular número de icarios de las hermanas Giribaldy Raluy mencionado anteriormente y después una nueva salida de Tortell Poltrona con su número del micrófono. 

El final del espectáculo llegó antes de lo que esperábamos pero con un cierre de alto nivel gracias al número de mano a mano de los Hermanos Marton al estilo “olímpicos”.

Este encuentro entre el universo del Circ Raluy y Tortell Poltrona ha sido presentado como una unión entre dos maneras de entender el circo, pero nos deja con la sensación de que sus visiones tienen más semejanzas que diferencias. 

William Giribaldi se reafirma en la apertura del Circ Històric Raluy a nuevas propuestas incidiendo en que entre el circo tradicional puro y el contemporáneo más absoluto, hay un amplio espacio de encuentro y entendimiento que puede y debe hacer crecer el arte circense. 

Jaume Mateu, Tortell Poltrona, confirma esta visión con entusiasmo, reivindicando un reconocimiento mayor para el patrimonio cultural y circense que supone un proyecto como el Circ Històric Raluy. 

Este espectáculo se ha presentado como algo irrepetible y, sin embargo, al preguntar a las dos partes si se repetirá, ambos contestaron: seguro que sí. 

Aunque de momento el circo seguirá su gira sin Tortell Poltrona desplazándose a Sant Cugat del Vallés donde debutará el próximo viernes 10 de octubre. 

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