FiraTàrrega, más allá de su megaoferta de espectáculos de teatro, danza e instalaciones, tiene siempre un rinconcito, o unos rinconcitos, para el circo. La verdad es que en esta 36 edición de la feria, que se cerró ayer domingo, hay algunas  cosas que merece la pena destacar. En primer lugar, el rotundo éxito de Garbuix, el espectáculo del 20 Circo de Invierno del Ateneu de 9Barris (Barcelona) dirigido con gran acierto por el polifacético cómico Guillem Albà y el profesor de acrobacia Alberto Feliciate, que recientemente ha abandonado la escuela Rogelio Rivel para impartir clases en la prestigiosa escuela sueca DOCH. 

El espectáculo, cuando se estrenó en las pasadas navidades en el Ateneu, ya convenció a mucha gente (ver Zirkólika 48); pero por lo que hemos visto en FiraTàrrega se puede decir, sin tapujos, que se confirma como uno de los espectáculos de circo de sala más redondos y completos de los producidos los últimos años en Catalunya. Divertido, cómico, ingenioso, sorpendente, virtuoso y con un ritmo trepidante, con gran espíritu circense y una gran compenetración de las cinco protagonistas (Serena Vione, Juana Beltrán, Jessica Arpin, Jessica Martín y Lola Ruiz). No canto yo solo estas alabanzas, que eso no importaría demasiado. El público, que abarrotó las dos funciones del viernes en el Ateneu de Tàrrega, se lo pasó en grande y los responsables del otro Ateneu, el de Nou Barris, irradiaban sonrisas. La cosa funcionó a las mil maravillas.

Garbuix es un excelente espectáculo de circo de sala que incluye números de trapecio, mástil chino, equilibrios y hasta guerra de cojines y discursos del revés. Se trata de pasar un rato loco, agradable, divertido y jocoso. Y todo esto lo consigue con creces. Por todo esto sorprende que Garbuix no se haya visto primero donde tocaría por lógica, en la feria de circo Trapezi, y en cambio sí haya tenido su espacio en la programación de FiraTàrrega.  Las buenas sensaciones que dejaron las dos funciones permiten al Ateneu de 9Barris confiar en que este espectáculo se gane el interés de los programadores y se pueda ver en muchas otras salas, que bien merecido lo tiene.  

La otra gran compañía de circo que se vio en FiraTàrrega fue Svalbard, con un Quim Girón (acrobacias) brillante y muy bien integrado en el cuarteto de artistas. Girón, que se dio un pequeño batacazo con el espectáculo Sapiens Zoo, coproducción del Mercat de les Flors que tenía que presentarse también en FiraTàrrega, realiza una exquisita exhibición de acrobacias, canta incluso música country y se mueve con una gran soltura, destreza y habilidad. Svalbard -hablemos un poco de la creación- es un espectáculo de circo que me pareció de una gran calidad, con buena técnica, una puesta en escena muy cuidada y un final muy cachondo.

También tuve el placer de ver a Toti Toronell en una carpa cuadrada que se ha construido él mismo. El miniespacio es estupendo y cuenta con varias filas, incluso hay la fila que filaràs y una bancada que es el gallinero. Le deseamos toda la suerte del mundo.